Mortal Engines

Título original: Mortal Engines
Año: 2018
País: Estados Unidos / Nueva Zelanda
Duración: 128 min
Dirección: Christian Rivers
Guión: Fran Walsh, Philippa Boyens, Peter Jackson (basada en la novela de Philip Reeve)
Fotografía: Simon Raby
Género: Aventuras, Acción, Postapocaliptico, Steampunk; Fantasía.
Reparto: Hera Hilmar, Robert Sheehan, Hugo Weaving, Jihae, Leila George, Stephen Lang.

Sinopsis: En el futuro, las ciudades se han motorizado y se trasladan a través de la geografía cazando otras poblaciones para hacerse más fuertes. Aunque el pasado está marcado por una guerra en la que se usaron armas de energías muy peligrosas capaces de causar cataclismos, la codicia por el poder lleva a desenterrar estas viejas armas y Hester Shaw es la única capaz de pararlas.

Crítica: Es una película sin mucha profundidad, directa, muy bonita visualmente pero sin grandes giros de guión. Suple la sencillez de la trama y los personajes tópicos con continuas escenas de acción capaces de entretener al espectador desde el inicio. El vestuario y los escenarios son espectaculares, propios de un anime o de un cómic y eso mola un montón, te hace conectar con tu lado friki. En cuanto a las interpretaciones, destaca la de Hugo Weaving, que recuerda irremediablemente al Elrond de el Señor de los Anillos, aunque mucho más intenso. También la de la desconocida Hera Hilmar como la heroína de la película y Robert Sheehan como co-protagonista. Quién iba a pensar que el gamberro Nathan de “Misfits” (serie del 2009) se nos iba a convertir en un galán de aventuras. El chaval da el perfil absoluto de héroe de cómic, aunque en realidad la película se basa en las novelas de Philip Reeve.
En resumen, película entretenida, apta para todos los públicos, sin pretensiones profundas.

Lo mejor: La imagen, los decorados, el vestuario.
Lo peor: Los personajes tópicos, la sencillez excesiva del guión.