El día que vendrá
Título original: The Aftermath
Año: 2019
Duración: 108 min
Género: Drama, romance, II Guerra Mundial.
País: Reino Unido
Dirección: James Kent
Guión: Joe Shrapnel, Anna Waterhouse, Rhidian Brook (novela original)
Música: Martin Phipps
Fotografía: Franz Lusting
Reparto: Keira Knightley, Alexander Skarsgård, Jason Clarke.
Sinopsis: Rachael Morgan (Keira Knighley) viaja a Hamburgo justo después de que los aliados hayan conseguido ganar la Segunda Guerra Mundial. Allí se encontrará de nuevo con su marido Lewis (Jason Clarke), un coronel británico destinado a la reconstrucción de la ciudad. Una vez el matrimonio se ha reencontrado, se mudan a una nueva casa, muy lujosa, que anteriormente había pertenecido a un arquitecto alemán (Skarsgård). Pero para su disgusto, Rachael descubre que su marido ha decidido que los anteriores propietarios no deben abandonar la vivienda, pasando a compartir el espacio, causando tensiones entre ambas familias que desembocarán en un drama apasionado.
Crítica: Es una película en la línea de los dramas románticos de la Segunda Guerra Mundial, un cruce de sentimientos entre nacionalidades enfrentadas por el conflicto. La película se centra en dos familias heridas por la guerra (de ahí el título que se traduciría literalmente como “Las Secuelas”). Ambas han perdido un miembro de su familia en los respectivos bombardeos: Los Morgan por parte de los Nazis en Inglaterra y los Lubert por parte de los Aliados en Hamburgo. Al final la conclusión es que, a raíz de la violencia, la desgracia y la destrucción; el instinto de supervivencia y la naturaleza humana nos hace sobrevivir apoyándonos en los sentimientos más hermosos: el respeto, la piedad, la pasión y el amor. Tal y como ya se había visto en la película de 2014 protagonizada por Michelle Williams, Kristin Scott Thomas y Matthias Schoenaerts, y a su vez basada en la novela inacabada de Irène Nemirovsky, “La Suite Francesa”, en la que los Nazis tomaban posesión de las casas de los habitantes del pequeño pueblo de Bussy durante la ocupación; “El día que vendrá” hace un efecto espejo, planteando una situación sentimental similar entre sus protagonistas e invirtiendo los bandos.
Siempre es un placer ver una película de Keyra Knightley, una actriz que casi puede decirse que esté especializada en dramas históricos (viendo “El día que vendrá” es inevitable acordarse de “Expiación”, del 2007). Los amantes del cine de drama romántico histórico, sabemos que la presencia de Knightley en el casting es casi un requisito para fiarnos de que la película tenga la profundidad, la sensualidad y la intensidad suficientes. En éste caso llega incluso a eclipsar a sus co-protagonistas, aunque Jason Clarke brilla en las escenas finales. Alexander Skarsgård, sin embargo, se mantiene en un perfil bastante neutro. Su personaje es correcto y galante, aunque despierta sus instintos en los momentos más candentes, recordándonos al Eric Northman de “True Blood”. Es curioso ver al hijo de un actor que tantas veces hizo de antagonista (Stellan Skarsgård) interpretando personajes tan tiernos (muy dulce en la película de 2012 “¿Qué hacemos con Maisie?”) pero es que en realidad Skarsgård es mucho más que un musculitos sueco (“La Leyenda de Tarzán” 2016) y seleccionando o siendo seleccionado para éste tipo de papeles los espectadores estamos encantados de verle.
Lo peor: El exceso de drama, el punto de inflexión metido a palanqueta.
Lo mejor: El momento histórico (posguerra mundial), la localización de la acción, el decorado de la casa y el final.